cosas de niños (santiago)
Pachamama, nuestro más sincero apoyo a este centro de cultura que, aunque no hallamos frecuentado muy a menudo, tenemos en alta estima. Evidentemente el Estado tiene el monopolio de la fuerza, evidentemente las leyes no respoden a la justicia, evidentemente la burocracia es una arma más para impedir y entorpecer el quehacer humano. La clandestinidad es un estado que si se prolonga en el tiempo, sumado a un crecimiento de la actividad, solo se puede mantener en tanto que reditue lo suficiente como para poder alimentar a los inspectores y a la fuerza policíaca, no veo muchas más alternativas a esta opción, salvo que se tomen en cuenta los preceptos de la TAZ y si armen y desarmen zonas autónomas constantemente. Obedecer lo que dicta la ley, por otra parte, es embarazoso y no son nada baratos los impuestos, más allá de toda prédica ideológica. Nosotros como autores, editores, directores, diseñadores, distribuidores, imprentas y demás de nuestra revista nos vimos más de una vez en la disyuntiva de realizar o no ciertos pasos legales "obligatorios" dentro del rubro. Y algunas veces tuvimos que acceder, otras decidimos que no nos convenía o que no queríamos, que no lo necesitábamos, al punto de que si queríamos estar en los quioscos de diarios y revistas necesitabamos trabajar si o si con una distribuidora oficial , que nos sacaba el 45% del precio de tapa y además, y sobre todo, para trabajar con ellos necesitabamos facturar, o sea pagar monotributo o IVA, además de impuesto a las ganancias, haciendo un total mínimo de $150 mensuales aprox. Suena poco pero no nos rendía ni ahí. Quién sabe si, llegado el caso de tener un público más numeroso y la fija de que vamos a vender lo suficiente como para no perder plata entre tantos números, nos enbarcamos en esa movida tan bizarra que es la de llenar papeles y firmar y pagar impuestos y tener un número de CUIT un registro y tener un talonario con facturas y cumplir con los requisitos requerido para el caso, etc, que te permiten, dada tu colaboración y contribución fiscal voluntaria y pacífica, que te dején en paz. Quieren, y lo logran, participar de las actividades financieras de sus ciudadanos, quieren, y muchas veces lo logran, controlar, normalizar, estructurar y estandarizar las actividades de sus ciudadanos. Cuando, en un momento dado, uno empieza a gestar algún tipo de movimiento, aparecen, y eso es casi inevitable, pero, ya lo dijeron ustedes: también es signo del hacer propio, de una actividad que no va a desaparecer así como así.
santiago del grupo NIÑOS
